Hacemos mobiliario porque es así como nuestros ancestros nos enseñaron a darle sentido al mundo, a aprehenderlo e imaginarlo, a dejar en él nuestra huella.
Trabajamos porque nuestra sociedad sea cada vez más sensible al buen diseño; por dar vida a espacios nuevos y lugares antiguos; por fortalecer vínculos propiciando encuentros bellos y generadores; por ser un apoyo para quienes escriben poemas, diseñan pósters,
envían emails, disfrutan de la gastronomía, tocan un instrumento o contemplan arte.